Cerdopolis

En junio del 2006, Rospigliosi, Villarán y Salinas denuncian públicamente a Mufarech por delitos de contrabando, encubrimiento personal y omisión de denuncia.Presentan un video y mencionan el audio sostenido entre Mufarech y Crousillat. La denuncia terminó archivada y sirvió para que en febrero del 2006, Mufarech replicase denunciando a sus acusadores de calumnia. Mufarech también denuncia a Rospigliosi por establecer un convenio con ProÉtica cuyo objetivo era velar por un proceso transparente en la compra de uniformes de la policía donde el propio Mufarech, empresario textil, tenía intereses particulares.

Luego de dos años, a iniciativa de Aurelio Pastor –si el mismísimo del indulto a Crousillat- se establece que existen dudas razonables respecto a la responsabilidad que tiene Rospigliosi en el caso de ProÉtica. En setiembre de ese mismo año Cuarto Poder revela el caso de los petroaudios donde Rospigliosi juega un rol importante en la denuncia. Ganando tantos enemigos fujimoristas y apristas, no había que ser vidente para saber que la denuncia impulsada por Aurelio Pastor - repito, el mismísimo del indulto a Crousillat- iban a pasarle factura. El 31 de Marzo del 2009, Rospigliosi es acusado constitucionalmente e inhabilitado para ejercer cargos públicos por cinco años.

Al día siguiente de la sanción, Susana Villarán escribió en su blog de la Mula un post de respaldo para Rospigliosi mencionanado que era un perseguido de apristas, fujimoristas y el propio Mufarech. Inmediatamente, el abogado de don Mufa, Jorge Castro - el mismísimo que tramitó el indulto de Crousillat - denuncia penalmente a Villarán por difamación. He releído el post y no encuentro ningún adjetivo calificativo, ni una injuria, ni siquiera un sarcasmo o metáfora pendenciera. Valgan verdades, mucho pedir a Villarán. Se trata más bien de un post lleno de relatos pasados donde lo más agresivo puede ser cuando sostiene que la sanción a Rospigliosi es “una acusación promovida por los más oscuros intereses, liderados por su implacable perseguidor: Jorge Mufarech, quien parece que tiene un gran poder hoy en el Congreso, como lo tuvo en el Gobierno de Toledo y en el de Fujimori”. Al presente, la sentencia de Villarán ha sido postergada, más para alargar el estrés y prolongar la angustia.

El asunto es que haciendo un mal o corrupto uso de las herramientas democráticas que existen, el gobierno aprista y sus aliados fujimoristas (¿alguien duda de ello?) tratan de controlar los medios de comunicación y de amenazar o amedrentar a los detractores del gobierno. El mecanismo contra líderes de opinión e inclusive bloggeros es la de establecer juicios bajo el supuesto delito de difamación. No importa tanto si se condena o no al acusado sino el tiempo, estrés y costo que demanda todo un proceso judicial. Más sofisticado y molusco movimiento incluye la intentona ley mordaza de Cabanillas, y más oscuro y truculento, el intento de devolver los canales a sus aliados siendo el caso de Crousillat el más bochornoso.

Cuando uno observa que en apenas un año están a punto de condenar a Villarán por hacer un recuento de hechos en un blog mientras por otro lado aún no se resuelve nada de los petroaudios sino todo lo contrario se borran misteriosamente files y encima quieren acusar a quienes guardaron copias espejo. Cuando uno observa que Rospigliosi ha sido inhabilitado de cargo público por 5 años cuando trataba de practicar “accountability” mientras Cabanillas anda suelta de huesos por el caso de Bagua sin ningún tipo de sanción. Cuando uno observa que una cucufata ministra quiere sancionar a sus mejores policías porque alguien filma su vida privada mientras que otro ministro deja a un delincuente probado libre y ante el escándalo muestra su risa de bótox, no renuncia sino espera que lo boten. Cuando uno observa todo esto, que más esperar en el mundo de los absurdos y caraduras. Estamos bajo el yugo de los pulpos y los spondylus. Solidaridad con Susana Villarán.