Cerdopolis

Alguien le grita corrupto (que no me queda claro si es un insulto) y Alan García aprovecha de estar con sus matones y cachetea al voluntario del hospital. El Ministro de Justicia alienta la cachetada y sostiene que sólo los maricas se dejan insultar. El Presidente hace todo lo posible para ocultar el hecho y funge de santo. Por esos días un estudiante deja parapléjico a otro porque lo insultó. Cuando unos programas periodísticos por fin entrevistan al voluntario del hospital, García acusa prepotente que los medios de comunicación incitan la violencia (¡?). Si el Presidente cachetea a quien lo insulta y el Ministro de Justicia llama maricones a quienes no reaccionan violentamente, con qué cuajo podemos reclamar a un estudiante que casi mata a otro porque lo insulta, con qué cuajo acusamos a los medios de comunicación de incitar violencia. ¡ ¿Con qué cuajo caraduras?! MdM-10 toca el tema.